Swingers, un universo al desnudo: Exactamente por la misma justificacion, cuando fuimos ingresando a las areas sobre movimiento, nos tuvimos que despojar del pudor, si o si.

Exactamente por la misma razon, cuando fuimos ingresando a las areas de actividad, nos tuvimos que despojar del pudor, si o si. Solamente por motivo de que ahi cualquier fluye tan natural, que el pudor parece nunca existir.

Mientras Victor Hugo nos mostraba los aposentos asi­ como las spa, varias parejas permanecian sumidas en lo suyo y ni siquiera parecieron percatarse sobre la notoriedad.

Dos parejas departian relajadamente en la esquina sobre Algunos de los jacuzzis. Entretanto los caballeros conversaban animadamente entre las burbujas calientes, las chicas se acariciaban desprovisto apuro, al tiempo que se besaban en la boca. De cuando en cuando, se incorporaban a la charla de los muchachos.

Si bien el voyeurismo se da por apoyado, nosotros nos sentiamos un tanto incomodos observando porque nunca era por las motivos “correctas” Novia brasileГ±o en el lugar, nunca era por el voyeur habitual alli, si no de luego contar lo que veiamos. En el final, nos sentiamos como gallinas en fiesta sobre zorros. Casi como la fortuna sobre impostores.

Tratabamos sobre orquestar una torpe charla sobre cualquier tema mientras en el jacuzzi la cosa iba in crescendo , cuando observamos a un compa a quien habiamos entrevistado antes, todo un astro, por evidente.

Cliente habitual de el lugar desde permite dos anos, cita el pais invariablemente cada 15 dias, ya que esta domiciliado en Texas, en donde goza de diversos negocios sobre importacion asi­ como exportacion, e invariablemente, cada 15 dias viene a relajarse a HD.

Precedido sobre la tremebunda prestigio por las dimensiones sobre su virilidad, Javier (apelativo ficticio) nos habia competente primeramente a ingresar en una de las habitaciones en las que el novio y su pareja swinger iban a departir con diferentes gente.

Javier abrio sobre par en par la camino sobre un aposento al otro flanco de el jacuzzi, se planto absolutamente desnudo asi­ como nos hizo vehementes senas con las manos para que bordearamos el jacuzzi e ingresaramos a la habitacion.

Adrian, quien a esas alturas tenia lios tremendos de soportar el pano en su cintura falto que se le resbalara mientras cargaba todo el aparato fotografico, me miro con cara de desconsuelo (supongo que le devolvi la mirada identica) y nuevamente, ruta hacia el patibulo.

Abertura, nunca porque estuvieramos juzgando lo que estabamos presenciando, Solamente por motivo de que el mood era absolutamente distinto al sobre todos los presentes asi­ como nunca habia forma de nunca sentirnos un escaso intrusos.

Sin embargo bueno, alguien tenia que hacer el trabajo recio. y asi caminamos hacia la puerta. Entramos.

Javier asi­ como su pareja departian apasionadamente con una diferente pareja en la cama que parecia efectuarse sido cenida exacta de las cuatro. Nuestra asistencia nunca los interrumpio en lo mas insignificante, tan concentrados estaban en su tema. asi­ como en la totalidad de las variaciones imaginables sobre el argumento.

Yo me sente a mirar en el sofa dispuesto de ello, mientras Adrian buscaba el lupa apropiado asi­ como lo colocaba trabajosamente en la camara. Era la torpeza andando, inclusive que rapido su bando personal se apaciguo y dio lugar a su faceta sobre comico. Se transmuto asi­ como ahi, sentada en el sofa sobre voyeurista presencial novata, para terminar pude escoger un poco sobre trayecto al mirar al fotografo concentrado en angulos prudentes, desprovisto rostros, escenas no tan crudas, composicion de la foto, etc.

Tenemos que hablar de que la prestigio de Javier, efectivamente, tenia asidero. Mas alla de gemidos y piernas y pechos y besos y dedos y sobre al completo separado y cualquier unido, se percibia una gran confort dentro de las cuatro, un enorme comodidad.

Cuando intui que los climax estaban por asomar, por una suerte sobre reserva – todavia no se bien por que– sali silenciosamente sobre la habitacion asi­ como deje a Adrian documentando el evento.

Un rato luego, Ahora en franca chachara con las protagonistas sobre ese episodio, supimos las razones de su bando swinger. ?Ah! Ademas descubrimos que las dos muchachas se habian popular min. antiguamente del aproximacion; de hecho, se presentaron formalmente Cuando estabamos, ellos desnudos asi­ como nosotros con nuestros panitos, bajandonos la senal sobre un tiron con la cerveza en la lingote de Tio Carlos.